En la cita de hoy, abordamos una subida al Hacho de Pizarra por el paraje de Raja Ancha (188msnm), sendero de la Cruz de Santo (421msnm), también conocida como Sierra de Gibralmora, por el magnífico pinar desde el mismo casco urbano. Un mirador geológico de una calidad indescriptible sobre la Cuenca media del Guadalhorce.

Unas vistas que a medida que ascendemos se van haciendo mas gratificantes  agradecidas en el esfuerzo del repecho, en el entorno del futuro geoparque Guadalhorce, territorio de enorme patrimonio geológico que esperemos en un futuro próximo se integre en la Red Europea del geoparques y en la Red mundial de geoparques de UNESCO, sello de calidad de la excelencia turística y promoción estratégica de desarrollo del territorio cuyo eje principal vertebrador es la geología.

La ruta relativamente moderada aunque muy empinada en los escalones finales, se desarrolla sobre los antiguos sedimentos marinos, brazos del Estrecho Guadalhorce que interconectaban esta cuenca con la del Guadalquivir al norte. Las rocas sedimentarias que encontramos, denominadas “Molasas”, se formaron durante la fase postorogénica de formación de la Cordillera Bética en el ciclo alpino Terciario, pequeñas cuencas intramontañosas que recibían importantes tasas de sedimentación detrítica (bolos, arenas, gravas) de las inestables Zonas Externas y las Internas. 

Entre los materiales que encontramos a nuestro paso, observamos facies detríticas marinas cementadas muy retrabajadas por el oleaje y las corrientes costeras laterales, de calcarenitas y conglomerados areniscosos calcáreos con escaso contenido fósil. Estos sedimentos provenientes de abanicos deltaicos y conos deyectivos eran resedimentados en las zonas marinas costeras de desembocadura de los ríos y arroyos en proceso de formación, tras la denudación del recientemente creado continente” . La edad de estos materiales es establecida como Tortoniense, Mioceno superior (aprox.10 Millones de años), constituyente en este caso su sustrato en Pizarra, las formaciones de tipo Flysch Oligocenas.

Tajos y cantiles con fisuras y diaclasas verticales de relajación tectónica

Caos de bloques y colapso vinculados a toppling y vuelcos de tajos

Acceso a Raja Ancha

La sedimentación de las molasas constituyen episodios de relleno y colmatación de las recientemente creadas cuencas intramontanas, posteriormente a las fases principales de compresión y colocación de mantos de corrimientos que culminan en el Mioceno inferior.  

Todas estas formaciones son afectadas por procesos de distensión y elevación isostática durante el Neógeno-Cuaternario, dando relieves abruptos y verticales en el paisaje con cantiles y tajos característicos a cuyo pie aparecen acumulaciones de bloques caóticos, vinculados a complejos fenómenos de traslación (por deslizamiento del flysch infrayacente), y vuelcos de estratos, potenciados por previas fisuraciones verticales del macizo que cargan de agua los niveles inferiores flyschoides (arcillas y margas plásticas).

Una ruta del todo recomendada que combina con maestría la geología, los procesos geológicos e interpretación del paisaje del Guadalhorce que invita a su recorrido, disfrutando en esta llave de entrada al futuro geoparque que es el municipio de PIzarra.

Hasta pronto!